Cuando hacemos un planteamiento sobre cómo integrar a los niños con dificultades con sus compañeros normalmente siempre se nos ocurren que éstos acudan al aula ordinaria, nosotros practicamos la integración en este sentido pero también al contrario, es decir, los niños de otras aulas son los que vienen a conocer la nuestra. Aprovechamos ocasiones especiales para invitarles a desayunar, celebrar una fiesta o hacer múltiples actividades, en otras ocasiones bajamos nosotros con ellos a sus clases, por ejemplo los viernes hacemos psicomotricidad con los alumnos de infantil de 5 años. Pero la integración es recíproca, porque integrarnos nos integramos todos, los niños de las aulas ordinarias también aprenden que hay niños con una forma de entender y aprender distinta, comprenden que todo el mundo no es igual y que ellos pueden ayudar y ser amigos/as de todas las personas tengan o no una forma de aprender especial.
Mañana celebramos en nuestro aula específica el cumpleaños de tres de nuestros niños, y algunos de sus compañeros del aula ordinaria vienen a nuestro aula a celebrar con sus amigos un día tan especial como su cumpleaños, haremos una fiesta y todos juntos nos divertiremos, preparamos la fiesta en nuestro aula así, usando un anticipador.
Efectivamente, hay que trabajar no sólo con el individuo sino con el entorno donde esta personita se va a mover, vivir y realizar como tal.
ResponderEliminar¡Muy bien! ¡Aprenderemos siempre de personas como tú!
¡
Tienes todo mi apoyo y mis ánimos. Si algo necesitas, aquí estare...